25 de noviembre, 2020 14:08
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Escribo con la presión del adiós no esperado no querido pido perdón por tan poco que somos comparado con la generosidad de tu juego te matamos tantas veces te hicimos leña con cada una de tus caídas te cortamos las piernas te vendimos la peor droga la del éxito de un país frustrado que te vio nacer en una de las tantas villas que te vio triunfar desde el barro que te vio escupir sobre los palacios del deporte Diego es una parábola inigualable la del cebollita que se convirtió en Dios que se bajó del trono para reinventarse al que coronaron tantas veces y otras tantas lapidaron en las pantallas Maradona nos dio belleza y felicidad con alma y pasión agradezco ser tu contemporáneo y pido perdón por que cada vez que fuiste campeón cada vez que lograbas convertir el fútbol en arte cada vez que mordías el polvo y sacudías la red nos dabas mucho más de lo que merecíamos mucho más de lo que te devolvimos creo en Diego creo que la muerte no tiene idea de con quién se metió Leer más
Escribo con la presión del adiós no esperado no querido pido perdón por tan poco que somos comparado con la generosidad de tu juego te matamos tantas veces te hicimos leña con cada una de tus caídas te cortamos las piernas te vendimos la peor droga la del éxito de un país frustrado que te vio nacer en una de las tantas villas que te vio triunfar desde el barro que te vio escupir sobre los palacios del deporte Diego es una parábola inigualable la del cebollita que se convirtió en Dios que se bajó del trono para reinventarse al que coronaron tantas veces y otras tantas lapidaron en las pantallas Maradona nos dio belleza y felicidad con alma y pasión agradezco ser tu contemporáneo y pido perdón por que cada vez que fuiste campeón cada vez que lograbas convertir el fútbol en arte cada vez que mordías el polvo y sacudías la red nos dabas mucho más de lo que merecíamos mucho más de lo que te devolvimos creo en Diego creo que la muerte no tiene idea de con quién se metió
Etiquetas: editorial maradona subversiones