15 de agosto, 2019 15:17
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Columna de Política Internacional. Por Agustina Ordoqui. Durante el mes de junio, en un festival musical muy concurrido realizado en la ciudad de Nantes hubo una represión policial contra un grupo de personas que estaban escuchando música por fuera del horario permitido. Hubo una llamada por disturbios, acudieron las fuerzas de seguridad y se desencadenaron enfrentamientos que derivaron en una represión brutal, desproporcionada a la situación existente. Hubo dispersión con gases lacrimógenos y en ese contexto desesperante, los uniformados avanzaron y encerraron a los jóvenes. La única escapatoria a la represión era el río. Una de las personas que huyó era un joven de 24 años llamado Steve Caniço, que no sabía nadar y en esa situación de violencia estatal desapareció. Su cuerpo fue encontrado ahogado un mes más tarde y el caso está cargado de irregularidades. Leer más
Columna de Política Internacional. Por Agustina Ordoqui. Durante el mes de junio, en un festival musical muy concurrido realizado en la ciudad de Nantes hubo una represión policial contra un grupo de personas que estaban escuchando música por fuera del horario permitido. Hubo una llamada por disturbios, acudieron las fuerzas de seguridad y se desencadenaron enfrentamientos que derivaron en una represión brutal, desproporcionada a la situación existente. Hubo dispersión con gases lacrimógenos y en ese contexto desesperante, los uniformados avanzaron y encerraron a los jóvenes. La única escapatoria a la represión era el río. Una de las personas que huyó era un joven de 24 años llamado Steve Caniço, que no sabía nadar y en esa situación de violencia estatal desapareció. Su cuerpo fue encontrado ahogado un mes más tarde y el caso está cargado de irregularidades.
Etiquetas: abuso policial represión en francia steve caniço